domingo, 7 de diciembre de 2014

Despiértame


DESPIÉRTAME

Cual guerrera convulsiva
en ansias anduve,
la seductora furia
desplazó mi impotencia
y con disimulo los lloros
sobre tu piel cobriza
solo mostré mi sonrisa,
así tu fuego sagrado
quemara mis entrañas.

Eufórica de dicha prendida
creí estar preprada
para tui partida.
Más sin resignación al tiempo
la rebeldía engendrada,
domeñó mi nada,
y fui adormeciendo el grito
en manotazos de ahogada.

¡Vuelve!
¡Despiértame de nuevo!
Regresa e inventemos los dos
un renacido credo.